CÓMO SE GUÍAN LOS JUGADORES
“Voy. Voooy. Voy”. Una simple palabra que es capaz de avisar la
presencia del oponente o del aliado, evitar choques, revelar
ubicaciones, abrir caminos, iluminar un partido que se libra en la
completa oscuridad. Lo segundo que más se escucha es un balón que
encierra cuatro o seis cascabeles. Gira, rebota, se deja llevar, resuena
sin pausa. Así lo encuentran, lo dominan. El escenario es una cancha de
fútbol sala rodeada de vallas que impiden la salida del balón y que
permiten a los ocho jugadores invidentes ubicarse por cuenta propia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario